Artistics Gymnastics Spain Championship

Holas a todoooooooooooos :)

Como much@s sabréis, este pasado fin de semana estuve en el Campeonato de España de Gimnasia, así que aprovechando este hecho (y sumando mi falta de inspiración por motivos que más adelante contaré) me propongo hacer un “resumen de lo sucedido. Y no querido Ayshel, no me estoy copiando ;)

No quiero recrearme mucho y tampoco pretendo que esto sea un avuridiiiiiiiiiiiiisimo escrito largo largo y pesado pesado, así que me centraré en la competición y en pequeñas anécdotas (chorradas) que hicieron este campeonato algo único.

*sonrisa*

*trompetas*

*... We are the champions, we are the champions... *

XD, no, en verdad quedé segundo en paralelas en nivel ocho. Pero ja, la segunda plaza en un aparato era prácticamente inalcanzable, teniendo en cuenta el nivel de los demás chicos (claramente superior al mío) y la ingente cantidad de jueces asturianos (con perdón, pero es que putean a los NO asturianos que no veas). Sin mencionar el calor que hacía. Por favor, un par de grados más y me deshacía en medio de la pista en serio. Uf, fue horrible. 

Pero Adsi logró vencer todas las adversidades, y sin ni siquiera darse cuenta, volvió a casa con una medalla de plata colgada del cuello. Je je, se podría decir que abandono este deporte con la cabeza bien (bastante) alta XD. 

Me podría explayar guapamente contando mis sentimientos y sensaciones, ¿pero para que? ¿para que si lo podéis ver vosotr@s mism@s? Si, este soy yo, y este es el ejercicio que me dio la plata y la satisfacción que aún me llena en estos momentos.

Y bueno, después de esto ya podemos pasar a las anécdotas y/o detallitos curiosos. 

...

¿¿¡¡A que no lo hice mal!!?? 

...

Lo siento, no podía evitar hacer la pregunta tonta XD.

Seguimos. A ver... oh, después de la compe, yo y Ayshel (y mi hermana) salimos fuera del pabellón para poder respirar ni que fuera un poco de aire puro. Estábamos sentados en la escalera de la entrada cuando yo alcé la vista y... vi un kebab. Dios santo, la cosa que más me apetecía en ese momento. Arrastré a Ay hasta aquel antro y nos compramos un kebab cada uno. Gigantes. Kebabs gigantes. Increíble de verdad, que bicharracos, me los miraba y pensaba “Como que al igual me voy a comer eso...” Pero bah, todos sabemos que el estómago de los chicos adolescentes... no tienen fondo XD, así que me lo terminé. Oh, pero me costó, ya lo creo que si...

Empecé a leerme El Juego del Ángel, de Carlos Ruiz Zafón. De donde saque el libro es un secreto que no voy a revelar. Que libro. 60 páginas que llevo y de verdad que me tiene enamorado. Como escribe este hombre... genial, simplemente genial. Es una pasada de verdad, si no os lo habéis leído os lo recomiendo, porque por el simple placer de ver como juega con las palabras ya vale la pena.

Esto ya lo ha contado Ayshel, pero tengo que contarlo yo también XD. Estábamos en el hotel, Ay y yo en la habitación, tan tranquilos mirando cosas por internet que en “teoría” no deberían mirarse... Bueno, eso, que estábamos en la cama y de golpe, sin previo aviso, empieza a sonar la alarma del hotel. Y yo no sé, pero la alarma era en plan... “Joder sí, soy la mejor alarma del mundo y voy a despertar a Valencia entera” Me pegué un susto de muerte, pero para nada, solo eran niños (trasgos malditos camuflados en mi opinión) jugando con el secador y el detector de incendios. Rectifico, esos chavalines eran trols enpequeñidos. Una falta de inteligencia de este calibre no es normal...

Y bueno, no creo que haya nada más que contar... al parecer no han dado para tanto las anécdotas XD.

Kissssssssssusssssss :333